Paroles: Joaquin Sabina. ¿hasta Cuando?.
Un ano cualquiera
al norte del sur,
Aytor y Carmela
deciden en una taberna gudari
de San Juan de Luz
que, en vez de guitarras,
dentro del fly case,
la polvora etarra
imponga su ley.
Estrategias del destino,
luto y nieve en la ruleta del
camino.
Salida de misa,
viernes de pasion
un yonki agoniza
en technicolor.
Peninsula histerica,
borracha de sol
heridas de guerra
que nadie gano.
Y todo el mundo
sigue hablando, compitiendo,
adulterando,
desmintiendo, puteando.
Y todo el mundo alucinando,
reprimiendo, sospechando,
malviviendo,
conspirando.
Vamos a matar la muerte,
vamos a inventar
una cancion
por la gente sin voz
que no quiere olvidar.
Entierros en Cadiz
comando en Madrid,
sonando en euskadi
con una frontera en Touluouse
y otra en Valladolid.
Sobre un cielo helado
de viscera y nata,
tormenta escarlata
sangre en el tejado
y tripas de cualquiera
junto a la cartera
de un guardia jurado.
Y Maitetxu mia
que murio aquel dia
y resucito
y don Nadie Perez
pisando un alferez
bajo un camion
buscando un pedazo
que se le perdio.
Y todo el mundo sigue hablando,
compitiendo, adulterando,
desmintiendo, puteando,
y todo el mundo alucinando
confundiendo, sospechando,
malviviendo, conspirando.
Y todo el mundo
sigue andando, padeciendo,
despertando, repitiendo,
imaginando.
Y todo el mundo, blafemando,
maldiciendo, apostando
a cara o cruz, improvisando.
Desesperados y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
al norte del sur,
Aytor y Carmela
deciden en una taberna gudari
de San Juan de Luz
que, en vez de guitarras,
dentro del fly case,
la polvora etarra
imponga su ley.
Estrategias del destino,
luto y nieve en la ruleta del
camino.
Salida de misa,
viernes de pasion
un yonki agoniza
en technicolor.
Peninsula histerica,
borracha de sol
heridas de guerra
que nadie gano.
Y todo el mundo
sigue hablando, compitiendo,
adulterando,
desmintiendo, puteando.
Y todo el mundo alucinando,
reprimiendo, sospechando,
malviviendo,
conspirando.
Vamos a matar la muerte,
vamos a inventar
una cancion
por la gente sin voz
que no quiere olvidar.
Entierros en Cadiz
comando en Madrid,
sonando en euskadi
con una frontera en Touluouse
y otra en Valladolid.
Sobre un cielo helado
de viscera y nata,
tormenta escarlata
sangre en el tejado
y tripas de cualquiera
junto a la cartera
de un guardia jurado.
Y Maitetxu mia
que murio aquel dia
y resucito
y don Nadie Perez
pisando un alferez
bajo un camion
buscando un pedazo
que se le perdio.
Y todo el mundo sigue hablando,
compitiendo, adulterando,
desmintiendo, puteando,
y todo el mundo alucinando
confundiendo, sospechando,
malviviendo, conspirando.
Y todo el mundo
sigue andando, padeciendo,
despertando, repitiendo,
imaginando.
Y todo el mundo, blafemando,
maldiciendo, apostando
a cara o cruz, improvisando.
Desesperados y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
y hasta cuando
Joaquin Sabina
Joaquin Sabina
Recherches fréquentes